EJERCICIOS PARA ESTIMULAR EL PEZÓN: TRUCOS PARA AYUDAR A LA LACTANCIA MATERNA

Los ejercicios para estimular el pezón pueden ayudar en la lactancia, especialmente para las madres con pezones invertidos o planos. La prioridad sigue siendo siempre el agarre correcto.
La lactancia materna es sin duda un momento importante de conexión entre la madre y el bebé. Además de la parte emocional - evidente por la recepción y transmisión de afecto - también está la parte física.
La lactancia materna es fundamental para la salud de los recién nacidos, especialmente en los primeros seis meses de vida. La leche materna es un alimento completo, con todos los nutrientes, vitaminas y minerales necesarios para esta etapa del desarrollo.
Además, la leche contiene los sabores ingeridos por la madre, lo que también puede ser ventajoso para una mejor introducción de alimentos. En otras palabras, el bebé ya estará familiarizado con elementos de las comidas diarias de la familia.

Dificultades en la lactancia y el agarre correcto

A pesar de ser un proceso natural del cuerpo humano, es completamente normal que algunas mujeres tengan dificultad para amamantar. Un factor que puede traer obstáculos incómodos es la anatomía del pezón.
El pezón invertido y el pezón plano suelen causar algunas molestias y en ocasiones requieren más tiempo de adaptación entre madre y bebé.
En la mayoría de los casos lo que se necesita para una lactancia materna eficiente es solo lograr el agarre correcto.
El agarre ideal no lastima a la madre y optimiza la producción de leche. La postura perfecta debe ser “vientre con vientre”, con el niño en el regazo de la madre. Luego, el bebé debe abrir bien la boca, en forma de “O”, incluso antes de llegar al pecho.
Cuando está en contacto con el pecho, el niño debe agarrar completamente el pezón y la areola. Esto es esencial para una buena succión. La barbilla del bebé debe tocar la parte inferior del seno y abarcar indispensablemente toda la areola inferior.
La parte superior puede quedar un poco expuesta, y con la cabeza ligeramente inclinada hacia atrás, sin “enterrar” la nariz en el pecho.
La siguiente imagen ilustra esto. Las posturas incorrectas causan dolor e incomodidad a la madre, ya que ejercen presión sobre las áreas equivocadas.

Otro factor a tener en cuenta es que el niño no debe hacer ningún sonido mientras amamanta, excepto el ruido que hace al tragar, por supuesto. Los labios deben verse como una forma de "pescado", ligeramente girados hacia afuera.
Si la madre quiere o necesita ayuda para lograr esto puede sujetar el pecho con el pulgar encima del pezón, dejando los otros cuatro dedos más abajo. Para complementar el apoyo, facilitando el movimiento de agarre, la región debe estar ligeramente apretada.
Aunque es natural e intuitivo, algunas dinámicas pueden tardar mucho en sincronizarse, provocando molestias e incluso agonía para la madre y el bebé.
Por ello, muchas mujeres, sobre todo aquellas cuyo pezón es menos prominente, deciden buscar ejercicios para estimular el pezón.
Es importante recalcar: Todas las mamás tienen pezón. Incluso si es plano o invertido. Aclarado esto, consulta algunas actividades o técnicas que pueden contribuir a una mejora en casos de problemas con el agarre correcto.

Ejercicios para estimular el pezón

Antes de señalar algunos ejercicios, es fundamental recalcar, una vez más, que no siempre se deben realizar. Por el contrario, lo ideal es tratar de corregir el agarre del bebé, optimizando la actividad en su conjunto.
Además, algunos trucos ya recomendados en el pasado no son más que mitos y pueden incluso lastimar el seno. Evita realizar cualquier actividad más invasiva o incómoda que no tenga un resultado clínicamente probado.
Ejemplos de lo que no se debe hacer:

• Pasar una esponja vegetal en el área;
• Untar crema hidratante;
• Forzar el pezón intensamente con las manos.

Todas estas acciones pueden dañar la salud tanto de la madre como del niño. Veamos ejemplos de técnicas positivas para estimular el pezón.

Extraer un poco de leche – extractor de leche

La extracción de leche con un extractor de leche ya es un proceso familiar para muchas madres. El método puede ser beneficioso para quienes tienen dificultades para amamantar.
La actividad ya es muy popular entre las mujeres que necesitan trabajar y no siempre tienen tiempo para amamantar en persona.
Normalmente basado en el método “Power Pump”, organizado por una rutina de intervalos, la acción aumenta la cantidad de leche y sacía el hambre del bebé.
Pero las ventajas van más allá. El uso del extractor también puede ser una fuente de ayuda para todas las mujeres que tienen problemas específicamente a la hora de amamantar. A veces, la ineficacia del momento se debe al exceso de leche.
Para explicarte mejor: cuando la mama está muy cargada de líquido, se hincha. El hecho de que sea más dura, menos maleable, dificulta el agarre correcto, y el bebé puede tener dificultades para agarrar correctamente el pezón y la areola.
Por lo tanto, extraer un poco de leche a través del extractor hace que el pecho esté más blando, más suave, facilitando el acceso al bebé. Asimismo, este procedimiento estimula el cuerpo simulando un movimiento de succión, ayudando a proyectar el pezón.
Por lo tanto, podes extraerte leche en un recipiente siempre que sientas que tu seno está más rígido o duro, por observaciones personales o por la negativa del bebé. Cuando le presentes el pezón nuevamente a tu bebé, el agarre será mucho mejor.
Si esto es lo que te ocurre a vos, proba con este ejercicio antes de hacer otro.

Dale al pezón un estímulo frío

Para aquellas mamás que tienen el pezón plano o invertido, y lo asocian a una lactancia ineficaz, una de las soluciones es estimularlo con hielo o algo frío, para que sobresalga.

Casquillos de lactancia

Es un objeto que crea un espacio entre el pezón y el sujetador, evitando un posible aplastamiento. El dispositivo hace una pequeña presión en la región que toca el seno, pero dejando el medio libre y el pezón proyectado.
Por lo tanto, esto ayuda a consolidar un formato más ventajoso para la lactancia materna.

Conclusión

En resumen, existen algunas prácticas que pueden ayudar a amamantar, pero aún circulan muchos mitos. No te dejes llevar por información que circula en las redes sociales y que carece de sustento.
Vale la pena recordar que, para que la extracción funcione, la prioridad siempre es lograr el agarre adecuado.
También es fundamental que el entorno elegido para la lactancia sea cómodo, tranquilo y relajante, tanto para la madre como para el niño. Si es posible, usa una silla acogedora y una habitación tranquila. Eso ya hace que todo sea más agradable.
Finalmente, reforzamos lo fundamental que es el seguimiento médico. Consulta siempre a tu médico obstetra o pediatra o incluso a las profesionales en lactancia.
Esto es válido incluso durante el embarazo y, obviamente, para los primeros momentos de vida del bebé.

Por lo tanto, evita adoptar cualquier método sin hablar primero con un profesional quien está calificado para comprobar realmente qué es lo mejor para vos.
Por supuesto, tu experiencia también vale mucho: no olvides que, si te duele, es probable que la lactancia no se esté dando de manera óptima.
Todos estos factores contribuyen a que la lactancia se desarrolle de la mejor manera, satisfaciendo al bebé y tranquilizando a la madre. Los numerosos beneficios, que pueden ser físicos y emocionales, aparecerán claramente en el futuro del núcleo familiar.
Este proceso por sí solo es un sueño hecho realidad para muchas.